"Jardines de Kensington" de RODRIGO FRESÁN

RODRIGO FRESÁN

 LOS JARDINES DE KENSINGTON

 

Hace tan solo unos días que he terminado de leer "Jardines de Kensington" del escritor Rodrigo Fresán (Argentina) y las sensaciones que deja el libro, tras su reposo y maduración, son magnificas.

Alguna vez, todos hemos soñado con esa utopía que es, el no crecer, el permanecer siempre niños y jugar a todas horas, que cada día fuera una fiesta.

Algo así, ocurre con este libro, que no quiere crecer, que tras cada hoja se esconde esa sombra que no dejamos de perseguir por cada capitulo.

Aquí, Fresán nos relata la vida de obras y milagros de J. M. Barrie, ese hombre que no quiso crecer, al igual que su protagonista Peter Pan. Barrie el escritor, pero también la persona, ese tipo introvertido que creo una de las obras más universales de la literatura de todos los tiempos.

Por el camino, Fresán, nos deja frases para pegar en cualquier álbum de fotografías. Me refiero a esa colección de retratos que vamos coleccionando con los años, sin darnos cuenta, como nuestro álbum de cromos particular (como cuando éramos niños) solo que en nuestro caso, no sabemos cual va a ser ese ultimo cromo-fotografía, que nos faltará para completarlo (el álbum de nuestra propia vida)

Si, todo comienza con un viaje, también la lectura, pagina uno, prologo, capitulo primero. Nuestra vida también tiene un inicio, nacemos, vivimos la vida y bueno, todos sabemos el final, la muerte, esa con la que todos contamos, pero no sabemos cuando vendrá a buscarnos..... y por el medio, ¿que nos queda? Bueno, nos queda, el tic tac de ese reloj que se comió el cocodrilo y que, a veces, escuchamos acercarse y se nos acelera el pulso. También Garfio, que cuya mano atrapó el cocodrilo, esa lección para todos, cuidado con el cocodrilo, no dejes que te atrape la mano.... corre, corre, te gritaría Peter Pan, mientras no deja de perseguir su sombra.

Un libro lleno de tiempo, de reflexiones sobre la vida, de recuerdos, que son como ese poso que deja el café. Quizás, solo sea cuestión de disfrutar el presente, de saborear cada instante como si fue el más especial. A nuestra espalda, atrás queda el pasado, lo que fuimos, lo que vivimos; a este lado el presente, lo que somos y allí al frente el futuro soñado, aquello que desconocemos.

Este es un libro iniciático, que nos habla de la vida, de sus capítulos, de niños enredados en un juego contra piratas, de la aventura de la vida. Cada capitulo, es una reflexión sobre la vida, sobre aspectos que en ocasiones se nos olvidan. Todo fluye, todo transcurre con esa normalidad aparente, pero mientras tanto poco a poco el cocodrilo, con su tic tac va alcanzándonos a todos.

Para todos los que una vez soñaron con nunca crecer, los que admiran a J. M. Barrie ó simplemente, quieren descubrir a un autor que escribe tan bien como Rodrigo Fresan, este es su libro.

 

Y por favor, nunca olvidéis  que si deseáis llegar a este lugar deberéis girar en la segunda estrella a la derecha, volando hasta el amanecer.

 

Rodrigo Fresan
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